El verde por el negro. Al ritmo actual, algunos analistas creen que las reservas de crudo se acabarán en unos cincuenta años. El “biopetróleo”, un combustible ecológico elaborado a partir de las algas, podría ser una de las soluciones al incierto futuro energético.
Varias son las empresas, como Aquaflow Bionomic Corporation (Nueva Zelanda) o Bio Fuel-System (España), que están desarrollando proyectos en el que las algas son la fuente principal para producir este petróleo ecológico.
Los combustibles elaborados a partir de fitoplancton surgen como una alternativa a biocombustibles como el bioetanol, que han sido señalados últimamente como uno de los responsables de la crisis mundial de alimentos.
Se ha argumentado, además, que estos carburantes de origen vegetal no están ayudando a combatir el cambio climático, pues no logran reducir el CO2.
Para producir bioetanol por ejemplo, se utilizan grandes cantidades de energía destinada al transporte de estos cultivos, al cuidado de la tierra, etc.
“Y si obtienes esa energía de combustibles fósiles, acabas emitiendo más CO2 de lo que emitirías simplemente usando gasolina del coche”, explicó recientemente el premio Nobel en Química Harmut Michel, en una entrevista concedida al diario español El País.
Solucion marina
¿QUE COMBUSTIBLE PUEDE SUSTITUIR AL PETROLEO?
Las algas como solución energética
Francisco de la Coba Tena
Londres
Londres
El verde por el negro. Al ritmo actual, algunos analistas creen que las reservas de crudo se acabarán en unos cincuenta años. El “biopetróleo”, un combustible ecológico elaborado a partir de las algas, podría ser una de las soluciones al incierto futuro energético.
Varias son las empresas, como Aquaflow Bionomic Corporation (Nueva Zelanda) o Bio Fuel-System (España), que están desarrollando proyectos en el que las algas son la fuente principal para producir este petróleo ecológico.
Los combustibles elaborados a partir de fitoplancton surgen como una alternativa a biocombustibles como el bioetanol, que han sido señalados últimamente como uno de los responsables de la crisis mundial de alimentos.
Se ha argumentado, además, que estos carburantes de origen vegetal no están ayudando a combatir el cambio climático, pues no logran reducir el CO2.
Para producir bioetanol por ejemplo, se utilizan grandes cantidades de energía destinada al transporte de estos cultivos, al cuidado de la tierra, etc.
“Y si obtienes esa energía de combustibles fósiles, acabas emitiendo más CO2 de lo que emitirías simplemente usando gasolina del coche”, explicó recientemente el premio Nobel en Química Harmut Michel, en una entrevista concedida al diario español El País.
Solución marina
“La ventaja de nuestro sistema sería obtener un producto energético equivalente al petróleo fósil pero sin emitir CO2″, explicó a BBC Mundo Bernard Stroïazzo, presidente de Bio Fuel-System y co-creador del petróleo ecológico.
El “biopetróleo” emite CO2 en la combustión, como cualquier otro combustible, pero la diferencia está en que “nuestro dispositivo absorbe el CO2 para producir energía. Es decir, recuperamos las emisiones de dióxido de carbono cuando son emitidas y la reconvertimos en un producto carbónico”, aclara Stroïazzo.
“Para producir una tonelada de aceite de girasol, que corresponde a nueve millones de kilocalorías, se tienen que gastar 19 millones de kilocalorías para el cultivo, el tratamiento (…). Esto evidencia que al final, se emite dos veces más CO2 que con un petróleo fósil”, asegura el presidente de la compañía española.
1.400 veces más productivo
Para hacerse una idea, hacer frente a la demanda de electricidad de un país como Inglaterra con biocombustibles, exigiría dedicar toda la superficie del país a cultivos energéticos (maíz o caña de azúcar por ejemplo).
La superficie de terreno que nosotros necesitamos es mínima, porque la máquina de producción está construida a lo alto, no a lo ancho”, explica José Martínez Rovira, director de Marketing de Bio Fuel-System.
“Nosotros hacemos cosechas diarias. Dentro de una plantación terrestre como la de la soja, las cosechas son una o dos veces al año”, continúa Martínez Rovira.
“Además, en un cultivo terrestre llega un huracán y puede destrozar la cosecha. Sin embargo nosotros, si tenemos un problema técnico, podemos solucionarlo en un solo día o en un par de días”.
Por lo tanto, las cuestiones del espacio y del mantenimiento quedarían solucionadas y añade Stroïazzo “lo fundamental es que no se trata de un cultivo alimentario”, por lo que no afectaría a las exigencias alimentarias de la población.
Millones de seres unicelulares producen el “biopetróleo”, que puede reemplazar al petróleo fósil.